
¿Se está perdiendo el Reino Unido los beneficios de la innovación tecnológica por no reconocer el valor del sector manufacturero?
Así lo afirma Scott White, asesor del gobierno británico (y director ejecutivo de Pragmatic ), en un reciente artículo publicado en el Times (£paywall):
"Somos muy, muy buenos inventando cosas, pero tendemos a no capturar todo su valor porque tenemos esta visión de que la fabricación no es importante, pero capturamos el 80% del valor llevándolo a la producción industrial", dijo.
Parafraseando, el argumento es que en el Reino Unido se nos dan muy bien las ideas y las innovaciones, pero debido a la falta de inversión y de apoyo a la fabricación nacional, no somos tan buenos como otros países a la hora de fabricarlas. Y eso significa que no nos estamos beneficiando tanto como deberíamos, porque no capturamos la mayor parte de la cadena de valor.
Por ejemplo, pensemos en Dyson: ideas brillantes, ideadas y diseñadas en el Reino Unido, pero fabricadas en Singapur, que recoge los beneficios de esa inversión.
El artículo del Times se refiere específicamente al auge de los semiconductores, donde: "Estados Unidos, la Unión Europea y Japón están invirtiendo decenas de miles de millones de dólares cada uno en fomentar el suministro nacional de componentes electrónicos esenciales.
"Sin embargo, los ministros han dejado claro que Gran Bretaña no buscará intensificar la fabricación masiva de microchips y se centrará, en cambio, en su experiencia en diseño y en los sofisticados semiconductores compuestos que se encuentran en los sensores, invirtiendo en el sector una cantidad mucho menor, 1.000 millones de libras, durante la próxima década."
Tecnología e innovación en la fabricación
Entonces... ¿cuál es la solución?
En CloudNC, creemos que la respuesta a perderse los beneficios de la innovación tecnológica... es solucionar el problema con tecnología.
Si utilizamos la tecnología para hacer más eficiente el proceso de fabricación, permitiremos a los fabricantes nacionales competir mejor con fuerzas como la globalización y hacer frente a retos como el déficit de cualificaciones, rejuvenecer la producción nacional y captar más de la cadena de valor de la fabricación.
Y no sólo porque estemos trabajando en soluciones que incluyen software para acelerar la rapidez y facilidad con que se puede programar un nuevo componente para una máquina CNC, ahorrando a los fabricantes cientos de horas de tiempo de producción al año.
Al fin y al cabo, también están llegando al mercado muchos otros avances que las empresas emplean para mejorar la funcionalidad. Por ejemplo, Augury es un unicornio con sede en Israel que utiliza nuevas tecnologías para evitar que las fábricas y las máquinas se averíen, manteniendo las cadenas de suministro operativas y funcionales.
La ampliación fabrica sensores inalámbricos que captan los sonidos emitidos por los equipos de la fábrica y luego los analiza con inteligencia artificial, detectando patrones que revelan si las máquinas funcionan a la perfección o están a punto de desbocarse.
También se puede aumentar la eficiencia cuidando mejor las entradas y salidas. Por ejemplo, reduciendo la cantidad de material necesario para producir un componente, o disminuyendo los residuos de su fabricación.
Solugen, una empresa química estadounidense, está haciendo ambas cosas: aplica enzimas y catálisis al jarabe de maíz, transformándolo en productos químicos utilizados en casi todas las industrias, incluida la manufacturera. Al hacerlo, consigue eliminar del proceso el uso de combustibles fósiles como el petróleo, el carbón y el gas natural, reduciendo tanto el coste como la huella de carbono.
En teoría, las soluciones de Solugen podrían producir alrededor del 90% de los productos químicos para cuya fabricación utilizamos actualmente combustibles fósiles. Así pues, si la empresa consigue ampliar su producción a escala mundial, podría cambiar el paradigma de cualquier industria que utilice productos químicos en grandes cantidades, como la industria manufacturera.
Las cadenas de suministro mundiales en el futuro
Es bonito señalar todos los avances tecnológicos que se avecinan, pero ¿realmente lo arreglarán todo y revitalizarán la producción manufacturera nacional?
Pues bien, en CloudNC hemos puesto nuestro dinero donde está nuestra boca. Disponemos de una fábrica de altas especificaciones en Chelmsford (cerca de Londres), con máquinas de 5 ejes de la máxima calidad, que suministra piezas y componentes para los sectores aeroespacial, nuclear, petrolífero y gasístico y automovilístico del Reino Unido.
En esa fábrica, estamos implantando y probando nuestro propio software, garantizando tanto que esté listo para ayudar a los fabricantes de todo el mundo, como que nuestra fábrica esté a la vanguardia de la tecnología y sea capaz de satisfacer las necesidades de nuestros clientes, sean cuales sean.
Por eso creemos que, si se le suministra tecnología de vanguardia, el sector manufacturero británico podrá competir en un terreno de juego global y prosperar, beneficiándonos a todos.
Y creemos que no sólo porque suministramos esa tecnología al sector, sino porque también nos beneficiamos directamente de ella.
¿Cree que nuestras soluciones pueden ayudarle? Póngase en contacto con nosotros y benefíciese hoy mismo de lo último en tecnología de fabricación.